viernes, 18 de noviembre de 2011

Kooaba: la cámara lo es todo

Día a día, la cámara se está convirtiendo en la parte fundamental del móvil. De ella depende, por ejemplo, toda aplicación que se base en la realidad aumentada, como la capa de bibliotecas que acaba de añadir el Ministerio de Cultura a Layar. La empresa suiza Kooaba se ha especializado en la tecnología de reconocimiento de imagen para crear aplicaciones que convierten a la cámara del smartphone (Android o iPhone) en una herramienta para recordar y compartir información. Paperboy es una aplicación que reconoce textos impresos en revistas o periódicos. Basta con fotografiar la página del artículo que nos interese y Paperboy se ocupa de almacenarla (indicando medio, número de página y fecha de publicación) o de buscar contenidos relacionados (webs, blogs, videos...). Y también permite compartir el texto fotografiado en redes sociales. Como suele ocurrir, la tecnología va por delante de los contenidos, porque Paperboy contrasta las imágenes con una base de datos que hoy es todavía muy limitada y en la que predominan las publicaciones alemanas o suizas. Para el público español, quizá sea más útil Déjà Vu, pues esta aplicación reconoce etiquetas de vino, portadas de libros o discos, cartas de restaurantes o cualquier otro texto o imagen impresa que queramos recordar o compartir. La aplicación va creando una base de datos que es algo así como una memoria visual del usuario, y de paso pone un poco de orden en el carrete de fotos del móvil.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Visitar Lisboa con un iPad

A través del boletín Expreso hemos sabido de LisbonPad, una empresa que alquila iPads a los turistas que visitan Lisboa. El sistema es sencillo: basta con reservar el dispositivo en la web y LisbonPad lo entrega al cliente en el hotel donde se aloje y se ocupa de recogerlo cuando termine el periodo de alquiler. El iPad va cargado con un buen número de aplicaciones (guías turísticas, periódicos, radios y televisiones, juegos...), entre ellas las imprescindibles para un viajero tecnológico: Maps, TripAdvisor, Facebook, Skype, Shazam, etcétera. Además, el viajero puede usar el iPad para compartir sus fotos en redes sociales, gestionar su vida digital o descargar más apps o música de iTunes (si tiene cuenta en Apple), ya que dispone de conexión ilimitada a Internet. El servicio no es barato: cuesta 33 € por día, más una fianza de 500 €, y el alquiler está limitado a los hoteles Lisboa, Estoril, Cascais y Sintra.